Aviso antes de empezar:Si ya leíste mi anterior obra, no es necesario que releer este prólogo.
Se escucharon siete trompetas, y del cielo portales se empezaron a abrir en cualquier lugar donde hubiese humanos. La mayoría de las personas empezaron a gritar mientras que otras se quedaron en shock. Nadie se creyó lo que veían, el apocalipsis era cierto. Inclusive algunos ateos empezaron a cuestionar si fue tan buena idea ser un no creyente.
Enfrente de todos apareció una pantalla holografica con un mensaje, y al mismo tiempo una voz se presentó. La voz fue hermosa, como la suave brisa de un verano que retumbó en los oídos de cada humano existente, primero se presentó:
"Un gusto, mi nombre es Gabriel, tal vez me conozcan un poco por sus escrituras sagradas." Esta rió suavemente, y agregó con un toque juguetón. "Aunque sus escrituras son un poco erradas, pero se les perdona."
Dando una respiración, este leyó lo escrito en la pantalla:
("Bienvenido, este proyecto se llevó a cabo por la colaboración de todos los dioses, todo para crear esto, el nuevo Juego de Rol Multijugador Masivo de Otro Mundo en la Vida Real o también referido como: Massively Multiplayer Otherworldly Role-Playing in Real Life.
Hoy por decreto divino, todos ustedes, estúpidos mortales, serán enviados a otro mundo a vivir. Siéntanse bendecidos y vámonos yendo.")
Aclarándose la garganta, este río un poco antes de seguir. "Bien, estás son las reglas: no hay nivelaciones personales, meramente hay equipamiento, los mundos se dividen en seis zonas; blanca: buena, azul: peligrosa, amarilla: más peligrosa, café: jodida, rosa: buena suerte sobreviviente, roja: rosa a la quinta potencia.
"Esperen, me salte una página. ¡Aquí está!" Todos escucharon un aplauso y el cómo Gabriel tosía para refrescar garganta. "Véanlo como un regalo de sus increíbles, geniales, extravagantes, súper perfectos dioses.
"Ahora si, volvamos con lo dicho. Bien. Las personas serán enviadas a distintos mundo según su región de nacimiento, pero lo importante es que: nadie tendrá dinero más que 300 de papel moneda, la moneda más básica del mismo. Ahí podrán hacer lo que gusten, aunque en las regiones del blanco al amarillo todo estará bien, por otro lado, las tres restantes son mortales.
"¡Pero no hay que preocuparse, todos tienen cinco vidas que se recargan cada 60 días! Bien, para agregar por último, las personas culpables de estos delitos: esclavitud, asesinato injustificado, abuso carnal, causantes de genocidios, pederastia, y tortura, serán enviados directos a zona rosa y roja. Todo esto es un total de que: el 46% de los hombres y el 44% de las mujeres serán enviados a zona rosa y roja. Sinceramente espere que fuese más, ¡¿No es genial que fueran tan pocos?!" Todos escucharon un aplauso y después una voz más seria de escuchó.
"Aquí Lucifer, a todos esos, les tengo un regalito en esas áreas. Papá me dejó divertirme un rato con ustedes."
La población inocente dio una pequeña risita, aunque al voltear a ver a su alrededor, muchos de esas personas vieron como sus cercanos parecían nerviosos. Muchos sacando rápidamente sus conclusiones y automáticamente salieron fuera de casa a vomitar, otros directamente se alejaron lentamente, incluso algunos amenazaron a esas personas. Los que peor se sintieron fueron todos aquellos padres y madres que vieron a su pareja o hijos parecer nerviosos, automáticamente tratando de hacer distancia de sus pequeños a ellos, aunque los más cegados por amor empezaron a negar que su persona ideal podría hacer alguno de esos actos.
"Bien, ahora que mi hermano hablo. Me toca decir las últimas cosas:
• Nadie es más que nadie, así que todos estarán en igualdad de condiciones.
• Las personas de esos mundos son tan reales como ustedes.
"Diviértanse, vivan, o sufran. Los quiere: el Ángel Gabriel y todos los dioses."
Con eso se escuchó un gran estruendo cursar los cielos y de golpe todo el planeta quedó deshabitado. Generosamente los dioses mandaron a las mascotas con sus dueños.
Meses pasaron de tal evento, y ahora la gente debe sobrevivir en estos nuevos mundos en el cual tu equipamiento lo es todo. Así que: ¿Nos acompañarías a la aventura, querido viajero?